jueves, 5 de marzo de 2009

es,simplemente,su necesidad


y no busca nada más que un abrazo, unos labios que le digan te quiero, amores que matan, silencios con miradas que le dejen helado el corazón, no quiere tardes de lluvia viendo una película, no necesita a cupido ni bellos poemas, solamente quiere un encuentro casual, no saber el nombre, descubrir el centro de la tierra, desenterrar su alma, al despertar mirar las nubes a través de la ventana y no tener nada más que hacer, gritar y reir, que se burle de ella, que la haga feliz, que la proteja de aquellos que una y otra vez le destrozaron el corazón, taparla cuando haga frio, apartarle el pelo de la cara, que cocinen para ella, perderse en una isla,darse cuenta de que vale la pena

2 comentarios:

Antzoki dijo...

me flipa como escribes...^^

Francisco Campos dijo...

y quién puede no ansiar esa felicidad y esa libertad que desconoce?

Sólo el hombre puede perder tanto tiempo en buscarla y definirla en vez de encontrar la certeza de que no existen, están tan dentro de nosotros que las perdemos al perseguirlas, se quedan atrás...